Con la llegada de las primeras heladas, llega también el momento para la poda. Con la poda regulamos el desarrollo vegetativo de la planta y controlamos la producción de racimos que tendrán las cepas. En Finca La Emperatriz no empezamos a podar hasta que las plantas se han deshojado totalmente, es el indicio que nos permite saber que la sabia se ha retirado completamente, y no vamos a perder ni un ápice de la fuerza el próximo año. En esta ocasión, fue el 12 de Diciembre de 2016, cuando el equipo liderado por Miguel Benito cogió las tijeras de podar y empezó el trabajo. Miguel es el encargado de campo en Finca La Emperatriz, y conduce un equipo de cuatro personas que atienden los trabajos del viñedo a lo largo del año, a las que se suman otras dos en momentos de máxima intensidad.
La poda no es sólo cortar los sarmientos; en Finca La Emperatriz, se pica una parte de los sarmientos y se esparce por las calles como abono. Con el resto, hay que ir haciendo gavillas y almacenarlas, las usaremos a lo largo del año para la brasa de las «chuletillas al sarmiento», ¡la mejor madera para un sabor inconfundible!
El 30 de Marzo finalizó la campaña de poda de este año. Han sido más de tres meses y medio de trabajo duro -pero fundamental- para conseguir extraer lo mejor de la tierra.